ARRASTRADOS POR EL MUNDO.
Tenemos que dar gracias a las libertades que nos permiten aplacar la sed de la inmensa curiosidad de conocimiento que siempre nos ha acompañado con todos esos colores de reflexiones múltiples, meditaciones e ideas inspiradas por tantos personajes relevantes que han enriquecido el patrimonio cultural de la humanidad.
Después de las experiencias tan diversas que nos han acontecido, (personalmente), me parece sorprendente el hecho, de que los libros menos conocidos, nos descubran tantas culturas diferentes sin que exista ninguna conexión entre unas y otras y hayan llegado a unas conclusiones semejantes a las que tenemos en la actualidad. Ésto es lo hermoso, lo universal e intemporal del conocimiento, porque el valor absoluto de la Verdad -que puede liberarnos- trasciende en el tiempo y el espacio para morar en la eternidad y el infinito. Es un conocimiento que puede ser alcanzado por cualquiera, dondequiera, directamente, porque la puerta que a él conduce yace en el interior de cada uno. En uno de los libros de servidor, éstas consideraciones son revisadas con el tema de la Vida antes de la Vida y las implicaciones que ésto conlleva para la interpretación de la salud o de la enfermedad, de las experiencias, las pérdidas y las ganancias que se pueden obtener. Tal y cómo lo analizamos allí, el contemplar la posibilidad de que podamos rastrear las causas que originaron situaciones presentes y etapas anteriores a ésta vida, nos amplifica enormemente en nuestra visión. Nos ayuda a encontrarle un mayor sentido y propósito a la vida, y nos compele a hacernos más responsables de las consecuencias de nuestros actos y omisiones. Con ello, no sólo nos hacemos más conscientes de la Realidad Espiritual sinó que podemos encontrarle un valor aleccionador a todo lo que nos sucede; al descubrir que las experiencias que vivimos nos corresponden y no son producto de una buena o de una mala suerte. Entender que el propósito de la Escuela de la Vida es brindarnos el día a día sobre aquellos retos, desafíos y cuestionamientos necesarios para impulsarnos a avanzar, a crecer, a madurar y para desarrollar todo nuestro potencial.
Habiendo entendido, que lo que se vive nos corresponde y es determinante en nuestras posibilidades para aprender y evolucionar, continuamos las reflexiones dirigiendo la atención hacia el hecho de que podemos elegir nuestra trazabilidad y cambiar el mapa, no sólo en un sentido material y personal sinó también en el sentido de trascendencia. Así que, necesitamos fortalecernos para asumir conscientemente y con conocimiento de causa las riendas de nuestras vidas, corregir las conductas erráticas y generar los cambios que sean necesarios para alcanzar el propósito trascendental de nuestra existencia. Recordemos, que el dolor se presenta en nuestras vidas en formas diferentes con pérdidas y obstáculos, para llamar nuestra atención ante el hecho de que puede que nos estemos desviando del propósito de nuestras vidas.
La cultura materialista e individualista aboga por el hecho de que poseemos libre albedrío, de que el destino lo elegimos y lo construimos con nuestras acciones, pero, se descarta la idea de un destino o de un hacer divino predestinado. Compartimos el criterio que da importancia a la necesidad de ser verdaderamente libres para elegir; y afirmamos también, que somos nosotros quienes debemos decidir y dirigir nuestras acciones pero no desde la inconsciencia, desde la ignorancia o desde la irresponsabilidad. Y en cuanto a que si tenemos un destino o un propósito predestinado, les diría, que ciertamente las huellas se inclinan pero no obligan a recorrer el mismo camino. Quiero decir con ésto que, existen facultades y potencialidades que podemos desarrollar o no, tendencias que podemos seguir o no, cualidades que podemos manifestar o no; eso, lo determinarán nuestras propias selecciones. Todos tenemos siempre la opción de elegir si subir o bajar, de ir a la derecha o/a la izquierda. Nadie nos obliga, salvo los hábitos. Como sabemos, hay hábitos saludables y están también, otros no saludables; hay hábitos de disciplina y de indisciplina, hábitos que construyen y hábitos que nos conducen a la más miserable de las ruinas. Si hay algo por lo que podemos esforzarnos, es por corregir nuestros hábitos, y si hay algo de lo que tenemos que liberarnos, es de los hábitos nocivos que nos "empujan" al fracaso, al dolor o/a algo peor.
La gente sin visión de futuro, carente de fe, de valores, sin principios éticos y morales y que nos empujan a la mundanalidad del modernismo, constituye una distracción sumamente poderosa y peligrosa que no nos ofrece mayores motivaciones para alcanzar una verdadera superación. Así lo entendió A. Einstein cuando expresó que: "el problema del mundo moderno es que proliferan los medios pero escasean las metas". En éstas circunstancias, se debaten en el mundo actual y se perfila para una juventud obnubilada por la tecnología, hipnotizada por el consumismo, vacía de aspiraciones y no comprometida con la conducción de la historia.
Realizar actividades para la orientación de adolescentes es, desde hace unos años, un motor para cada día con un mayor compromiso y una preocupación permanente por el futuro que les estamos heredando a las nuevas generaciones. Me preocupa que cada día sea más dificil la supervivencia, sea más fuerte la competencia mundana, más despiadada la indiferencia y la mezquindad, y veo a nuestros jóvenes totalmente extraviados, con vendas en los ojos, inconscientes y completamente ignorantes de la manipulación a la que están siendo sometidos. De esa preocupación -por intentar ofrecer una guía a las nuevas generaciones- que yá casi no tienen afirmación por la lectura, que a pesar de estar saturados de información carecen en su mayoría de una cultura general de contenido y profundidad, y que no disponen de unas referencias sólidas y saludables que les permitan discernir lo correcto de lo incorrecto. Hay que encontrar maneras accesibles y atractivas para que los jóvenes se impregnen de los conocimientos que puedan ayudarles a alcanzar la libertad y la realización conservando a su vez su salud y la del resto de la población. Porqué, posiblemente, no recurrirán como buscadores de guía, y porqué probablemente, tampoco sepan de la existencia del legado literario.
Quizás, la motivación más intensa que me mueva a escribir, sea la de enviar mensajes escritos por sus teléfonos móviles y ordenadores, con la posibilidad de encontrar un sólo lugar con un lenguaje accesible y actual, lo que vendría a ser algo así como un resumen, una síntesis y unas posibles conclusiones de los conocimientos tan diversos y profundos que requieren de cierta guía aclaratoria para su total interpretación. En especial para los más jóvenes o para aquellos, que como yá dije, las características de la vida no les han permitido tener una visión más amplia de la vida y disfrutar de una libertad de criterios.
Assalamo aleikum.
