ESCUCHAR es un PROCESO PSICOLÓGICO.
Todos sabemos, que las habilidades de una escucha activa son aportes muy positivos.
P. ¿Cómo potenciar aún más ésta cualidad?
R. Comenzando a formarse, a leer libros, estudiar y a hacer ejercicios de escucha para convertirla en una habilidad extraordinaria. Trabajar para aquietar la mente mientras práctican la escucha, concentrándose tan sólo en la otra persona sin relacionarla con su propio pasado y escuchar a los ancianos (Shaykhs) durante horas con entusiasmo. Ésta práctica es positiva, cuando no pasamos ni el más mínimo detalle, y preguntar cuando sea el tiempo para preguntar, pues eso también tiene un efecto en los ancianos (Shaykhs) que es muy psicológico.
Las palabras y las verdades subyacentes, los detalles, las respiraciones profundas, los silencios, las verdades que se pueden pasar por alto y que salen a la luz con paciencia.
Hay que pasar horas escuchando a los ancianos (Shaykhs), también a los que son profesionales, a los niños y a todos aquellos que aportan algo para purificar los egos. Conocer todos los errores que se pueden cometer al escuchar a la persona a la que se está escuchando y que se consideran importantes, fuertes y valiosos. Mientras ustedes escuchan, se revelarán los secretos y partes de sus vidas para quienes no se abren fácilmente. Al compartir sus secretos, también añadir un toque de humor a la conversación, la gente se unifica más con la conversación. Se descubre así el efecto de escuchar. Comprender qué se tiene que escuchar, es también la habilidad más importante para la adquisición. Prestar mucha atención, no es simplemente por ser un buen oyente. La gente tiene que dejar las etiquetas egoístas para volver a aprender a escuchar repetidamente sin alcanzar los muchos elogios por la intervención.
Cuando empiezan con los ejercicios de comprensión auditiva, aunque la gente diga "garbanzos" sin decir "los" yá se empiezan a aburrir desde el principio. Cuando otros hablan demasiado despacio, la mente se entretiene con decenas de temas que le hacen perder el hilo. Hay que saber llamar la atención en un tema concreto, para que se puedan concentrar en las frases interesantes y que no contengan trazas de jerga. A veces, sin querer, se relacionan ciertas historias o acontecimientos que la gente no asimila con lo que la rodea. En diez minutos sin comprender la relación, todos estarán aburridos. Sin embargo, cuando escuchan con paciencia algo que ellos conocen bien y se preocupan de verdad (por qué les afecta directamente), poco a poco se darán cuenta de que están mejorando su calidad de escuchar para obtener conclusiones favorables ante esos problemas expuestos y la mente sacará sus percepciones.
Éste desarrollo de la escucha resulta muy útil, yá que los reservados se van abriendo en forma de tiempos. Increíblemente, la atención también tiene buenos resultados de qué, cuando les escuchamos con atención les inspiramos. Se imparte así una formación en oratoria y dicción efectiva, pero incluso, también es positivo el impartir las clases de escucha desde la primaria. Actualmente se enseña a leer, escribir y hablar, pero no se enseña a escuchar.
Cuando alguien termine una frase, se guarda silencio por un segundo. Se tranquiliza la mente, pero no te prepares para responder inmediatamente. Simplemente guarda silencio; si la otra persona continúa hablando, la inspirarás. Si termina de hablar, tendrás un segundo para pensar, lo que había dicho.
Observa que la gente necesita ayuda con ésta terapia. El intentar establecer un vínculo de confianza, es para asesorar a sus convicciones con decisión. Es una clave que utilizan los couching y los psicólogos escuchando con atención. Otro aspecto de vida: es el fortalecer, además de escuchar, el saber plantear las preguntas profundas, tanto en los entrenamientos como al modelar a las personas con experiencia para hacerlos oyentes eficaces con unas experiencias muy interesantes. Pues quienes escuchan con eficacia, también influyen en el orador y se desarrollan más rápidamente.
Un porcentaje adecuado sería: hablar un 15% y escuchar en un 85%. Es como una relación médico-paciente. Para hacer el diagnóstico correcto, se hace necesario escuchar al paciente y hacer las preguntas adecuadas.
Nuestro maestro reflexionaba e intentaba ponerlo en práctica. Primero, investigaba, lo escribía, luego explicaba el tema a algunas personas y esperaba a que le hicieran todas las preguntas. Inmediatamente después, lo ponía en práctica y analizaba las prácticas. Tener la facultad de saber comunicar, siempre resulta muy útil en éste sentido; se pueden grabar las propias prácticas en video y cuando quieras puedes volver a verlas para sacar conclusiones. Observa los hábitos del habla y la escucha de diversas formas.
No juzgar a la gente.
Aprender a amar sin limitarse según las diversas características. A medida que aprendas a liberarte de las trampas del prejuicio, la comunicación mejorará. No tengas expectativas altas de los demás, no esperes que lo comprendan todo y, lo más importante, no luchar contra el ego natural de los demás. El egoísmo es algo inherente en el ser humano. Pensar solamente en uno mismo, es la primera acción del ego primitivo. El cerebro primitivo es utilitario y emocional, recuerda el principio y el fin, busca una comunicación fluida sin que intervenga el ego y disfruta de los contrastes a medida que aplicas lo aprendido.
A medida que se conoce a la gente, se aprende a no molestar con ciertos detalles a quienes no son expertos en dicho campo.
Puedes hacerles ver un mundo diferente que tiene historias diferentes. Aprende a valorar más, yá que te resultará más fácil cuidar la atención de los demás. Las personas que se aman de verdad, (cómo los verdaderos creyentes y los seres de la humanidad), dejan su amor propio de lado para resultar más comprometidos con la vinculación unitiva y hacer felices a los demás seres humanos con su experiencia, no con su yoismo. Las personas confían en quienes las hacen felices y comparten sus expectativas con ellas para desarrollar las mejores cualidades. Nunca presiones a los oponentes mostrando tus puntos fuertes ni la debilidad de los otros.. pues esa actitud son presentaciones que parten del ego tradicional para impresionar, pero no es un garante de profesionalidad y si que lo es en prejuicios.
P. ¿Es realmente más importante tener encanto para persuadir o la dulzura para compartir?
R. Tener encanto es una ventaja para un buen vendedor o para un charlatán, pero aún así, estarán alejados del amor y se basarán principalmente en infundir miedo, debilitando las energías espirituales. Además, se centrarán más en obtener unos beneficios pesados para sus propios bolsillos, no parabién de los demás. Cuentan también con la confusión mental, la incapacidad para tomar decisiones formativas y las energías negativas que dañan el Espíritu.
Cosas que hace la dulzura para compartir: amor y aceptación incondicionales, luz espiritual, caminar todos al unísono bajo la responsabilidad y purificarse con personas con mucha energía positiva.. siendo muy receptivos para el aprendizaje. El discurso de la dulzura espiritual no lleva competitividad ni tampoco diplomas económicos. Por ésta razón, nunca se puede considerar que la "persuasión" sea la culminación de una educación sana y llena de Espiritualidad.
Assalamo Aleikum.