KHALWAT o JALWAT (Privacidad, Compañía y Existencia).
Khalwat, literalmente significa retirarse a un lugar tranquilo y preferir la soledad, es utilizado por los sufíes para referirse a los iniciados que se alejan de las personas para dedicar todo su tiempo en adorar a Allah y sentir la compañía constante de Allah. Es una experiencia y estado para el encuentro. Y se encuentran. También significa restringir los poderes de la vista y el oído para "ver" y "oír" solo a Allah, confiar solo en Él y dedicarse exclusivamente a Él.
Lo fundamental para la Khalwat (en privacidad) es que se purifique el espíritu, se limpie el alma y se vuelva el corazón y la conciencia a Allah de manera exclusiva para alcanzar Su constante compañía. Como resultado de éste grado de volverse a Allah y el logro de Su compañía, un viajero a la Verdad es apoyado con ciertos dones Divinos y es favorecido por brisas de inspiración. Incluso puede ocurrir, que conversen con entes más allá de todos los términos de calidad y cantidad, lo que los sufíes denominan "susurros mutuos". Estas son todas las recompensas Divinas que vienen a cambio de la sinceridad y el esfuerzo de uno; por lo tanto, si esperan o exigen ésto es una muestra de mala educación. Por lo tanto, adorar a Allah y esforzarse en Su camino es para poder recibir tales recompensas, pero no deben de desviarse del objetivo básico de la servidumbre a Allah, y eso, equivale a perder algo en el camino hacia la victoria. Las almas perfeccionadas se sienten alarmadas incluso ante la llegada de tales recompensas sin expectativas ni exigencias, temblando de temor, de que han venido para conducirse a sí mismas a la perdición, y ellas mismas están consumiendo los frutos sempiternos del más allá en éste mundo fugaz. Por lo tanto, suplican a Allah, diciendo:
¡Oh Allah!, concede esos dones a quienes los piden; Por favor, muéstrame solo el camino a Tú visión (en el Más Allá).
De ésta manera, se enfatiza su máxima devoción a Allah sin esperar nada a cambio, excepto Su aprobación de ellos como Sus siervos y Su beneplácito.
Esto es para describir la privacidad y lo que los verdaderos viajeros del camino sufí han querido decir con ella. Sin embargo, algunos líderes sufíes han estrechado su marco y lo tratan como si estuviera relacionado con retirarse a las cuevas con pruebas tortuosas en donde los iniciados sufren deliberadamente; durante éste tiempo, un iniciado trata de acostumbrarse a hablar poco, comer poco, dormir poco y permanecer en soledad. Este punto ya ha sido explicado en los artículos del blog.
Los eruditos sufíes, (que abordan estos temas desde éstas estrechas perspectivas), han subrayado su universalidad, mencionando que toda religión y todo sistema espiritual da lugar a la privacidad, aunque difieran en algunos asuntos secundarios. Muchos han considerado como intimidad los años de residencia del profeta Moisés en Madián y sus cuarenta días de estancia en el monte Sinaí, así como la peregrinación de los Hijos de Israel por el desierto del Sinaí durante cuarenta años, y el retiro de la Virgen María que se menciona en el verso del Corán:
"E hicimos del hijo de Maryam y de su madre un signo (de Nuestro Señorío y Poder). A ambos les dimos cobijo en una colina fértil con agua corriente".
(con comodidad y seguridad)..
(Corán 23:50 ), y, finalmente, la reclusión del Mensajero de Allah en la cueva de Hira con el propósito de adorar. Dan gran importancia a la privacidad en nombre de la purificación espiritual. Incluso si se pudiera decir que todos los eventos mencionados anteriormente no brindan una base religiosa sustancial para la privacidad, no se puede negar la importancia de la privacidad al servicio del corazón. El corazón es considerado como la "Casa de Allah" (Existencia) y de ésta manera puede ser purificado de varios apegos a cosas que no sean Allah, siendo refinado e iluminado para que pueda recibir esas manifestaciones Divinas.
La privacidad es importante.. no para mantenerse alejado de las personas, sinó como un medio para una "conversación con el Amado" en la casa del corazón. Desde ésta perspectiva, podemos considerar que la privacidad es como una dimensión del camino espiritual en el camino hacia Allah y un paso hacia la consecución de Su compañía.
La privacidad, que los iniciados tratan de lograr a través de éstos ciclos de apartamiento, sirve para permitirles alcanzar el refinamiento hacia la purificación del corazón, el espíritu, la conciencia, los sentimientos y para que puedan desenvolverse entre la gente para guiarlos.
La privacidad es una vía esencial en el sufismo a través de la cual los iniciados pueden afinarse en la dimensión carnal de su naturaleza y descubrirse a sí mismos en lo más profundo de su humanidad. A través de la privacidad, los iniciados también pueden percibir claramente el propósito final de su existencia y poder experimentar las manifestaciones particulares de Sus favores sobre ellos a través de la lente de la humildad, impotencia, la pobreza y la necesidad esencial a su propia naturaleza. Por lo tanto, se vuelven a Allah con todas sus facultades, en la plena convicción de que Él es la única fuente de poder real, riqueza, conocimiento y de todos los logros.
La privacidad no consiste solo en el aislamiento de las personas, como dijo uno que llegó a los extremos en la soledad:
Hermanos, mi consuelo está en la intimidad..
¿Porque de quien me he hecho amigo?..
Publicitaron mis faltas y difundieron mis humillaciones. Durante toda mi vida, no he sido capaz de encontrar uno- Uno que ha sido verdaderamente fiel. Por ésta razón, he encontrado consuelo en la privacidad.
Aunque la privacidad es en apariencia un retiro de las personas, verdaderamente es un proceso para estar equipado con las necesidades de orientación, para vivir en compañía de las personas.
Al comienzo del viaje, aquellos que buscan tal privacidad se retiran a un lugar apartado, por ejemplo: permaneciendo en una habitación con el propósito de adorar. Comen poco, beben poco, duermen poco, hablan poco y se ocupan del recuerdo de Allah. Nunca abandonan la reflexión ni la autosupervisión. Cuando han alcanzado el punto final de perfección, regresan entre las personas y se disponen a servirlas como uno de ellos. Alcanzan la no existencia con respecto a su existencia carnal (ego).. adquieren una existencia.. que siempre está activa a través de las luces de la existencia Divina. En los conceptos, pensamientos y discursos de quien ha llegado a éste punto, el "yo" ya no existe; más bien la verdad y la Verdad Última existe. Por ésta razón, tal persona puede decir: "Ya no existo dentro de mí; ya no soy consciente de mi existencia". En su Diwan, Rumi describe éste sentimiento de inexistencia de la siguiente manera:
"Hemos sido favorecidos con un misterio, un viaje por el camino de la Verdad Última. Nos regocijamos en nuestra inexistencia. Venid, pues, y permanezcamos en nuestra inexistencia. Antes se nos cerraron las puertas, pero cuando nos salvamos de nosotros mismos, se abrieron todas las puertas. Nuestros corazones se han llenado de paz y satisfacción porque hemos quedado libres de nosotros mismos en éste camino. El Todohermoso Amado, Que se mantuvo oculto de nosotros, Ha acariciado nuestro rostro en nuestra inexistencia. Hemos muerto por Él y, a su vez, Él nos ha salvado de nosotros mismos".
Jalwat (la compañía) denota que los iniciados están libres del egocentrismo o cualquier cosa que alimente sus egos y habiendo sido equipados con las cualidades de pureza o la forma de actuar y ser espejos pulidos de Sus Nombres, se dedican al servicio en la causa de Allah con lo que tienen, preocupándose por la felicidad eterna de los demás durante toda su vida. Otro enfoque de la compañía es que, una vez que los iniciados se liberan de los valores relativos que les son propios, dedican su intelecto, lógica, razonamiento y lengua al servicio de la humanidad, a la luz de la lámpara de la Profecía.
Una persona que obtuvo ésta compañía ilumina algunas de las características de aquellos que la lograron de la siguiente manera:
"Aquellos que han alcanzado espíritus de compañía pulidos; Son los seguidos por las personas. Tienen tres marcas distintivas: Pureza del alma, refinamiento del corazón y un espíritu pulido. Son espejos de las manifestaciones de los Nombres Divinos".
Ya sea que uno prefiera la privacidad o la compañía, el verdadero logro es la servidumbre a Allah, cumpliendo perfectamente todo lo que ésta servidumbre requiere, y un sincero esfuerzo propio para hacer que otros lo conozcan y lo amen.
¡Oh Allah! Muéstranos la verdad como la verdad y permítenos observarla, y muéstranos la falsedad como falsedad y permítenos evitarla. Y otorga Tus bendiciones y paz a nuestro maestro, Muhammad, a su Familia y Compañeros. Amin.
Assalamo aleikum.