EL ADAB. (La Cortesía)
Al tratar con Allah y las personas, la religión exige un adab: buenos modales, conducta correcta, cortesía. El interior y el exterior deben ser impecables. “Hay dos tipos de cortesía: la cortesía oculta y la cortesía visible. La cortesía oculta es la purificación del corazón de los defectos; la cortesía visible es la preservación de los miembros de los pecados y de las viles cualidades. "Ésto concierne a todos, ricos y pobres." Se solía decir: que la cortesía es el apoyo de los pobres y el adorno de los ricos." El verdadero amor produce cortesía. "Si el amor es genuino, se fortalece la perseverancia del amante en la cortesía."
<A través del temor una mala costumbre según la cual se actúa sobre él, se le impondrá la misma carga (de culpa) que a quienes actúan según ella, sin ninguna reducción de su carga.> (Sahih Muslim)
El amor se vuelve genuino y la perseverancia en la cortesía hacia tu amigo se vuelve más fuerte.
Abū 'Utsmān le asignó un rango sublime. "No conozco ningún rango que sea mejor para el hombre que la sana cortesía, porque la vida de la mente es cortesía. A través de la cortesía ésta persona es que alcanza los estados exaltados y las etapas elevadas, y ambos estados (en éste mundo y en el más allá). "La cortesía en el trato con los grandes en las reuniones de los maestros entre los amigos de Allah lleva a las personas a las etapas más altas y al bien en éste mundo y en aquel otro. Recuerda que Allah dice: Si esperaran a que tú salgas, mejor les sería (Sura 49:5). Grande es el daño que el hombre grosero trae a sus seguidores. "El que se educa para ser educado por él todos serán educados, pero el que se opone a los bien educados, desprecia las cosas inviolables, y yá hasta los que le siguen (mutta-biūhu), se vuelven inútiles." La cortesía tiene sus reglas. Cíñete a ello, no preguntes hasta que estés listo para recibir la respuesta: "¡Un murid sirvió a Abū 'Ustmān durante diez años y nunca le faltó cortesía y deferencia. Viajó con el Shaykh a Hiğāz y emprendió prácticas ascéticas. Durante éste tiempo dijo: ¡Cuéntame uno de los secretos! Sólo después de diez años el Shaykh le dijo: '¡Cuando vayas al baño, bájate los pantalones!' Se podría decir mucho sobre ésto. ¿Quien lo entiende?, lo entiende. Ésta palabra es similar a una palabra de Abū Saçīd-i Abu l-Hayr, Cuando le preguntaron cuál era el conocimiento, y él respondió: "Lo que les decimos a los niños: ¡primero sonarse la nariz, y luego habla con nosotros!"
Assalamo Aleikum.