EL ARROGANTE CON LAS BENDICIONES (se ve a sí mismo como fuerte.)
Una persona que es arrogante consigo misma y no se somete, o siente su debilidad y se somete. La única razón para no someterse es la vanidad (la arrogancia acerca de lo que hay dentro de él y las bendiciones que tiene), y la única razón para la sumisión es cuando se siente débil.
Aquel que no presta atención a Allah, ni piensa en la otra vida, ve éste mundo como grandioso y se ve a sí mismo fuerte con las bendiciones que tiene porqué no ve nada más que éste mundo. Ésta arrogancia conduce a un sentimiento de envalentonamiento, estatus y destino, (lo opuesto a la sumisión,) y por lo tanto no se somete.
En cuanto a quien conoce a Allah y el más Allá, conoce su debilidad y por eso se somete.
Lo opuesto al verdadero conocimiento de la debilidad humana es un conocimiento fuertemente engañoso.
El hombre es arrogante con las bendiciones.
La base de la adoración y la guía es la transición de la vanidad a un sentimiento de debilidad personal, es decir, la transición de un sentimiento engañoso de estatus y grandeza a un sentimiento de sumisión, a través de la transición de la negligencia al verdadero autoconocimiento.
La adoración no se logrará hasta que la glorificación del valor de uno mismo, el dinero y las posesiones sea eliminada del corazón humano, y ésto no sucederá a menos que se elimine la negligencia hacia Allah y la otra vida.
El concepto de bendiciones:
Las bendiciones son dos cosas: el ser humano mismo y el mundo. El ser humano mismo es la expresión de bendiciones como el oído, el habla, la visión, el estómago, la mente, el corazón y todo lo que hay en el ser humano. El mundo son bendiciones como el agua y el aire, y también incluye lo que el ser humano disfruta, como el dinero, los hijos, los deseos y la tecnología. Allah ha puesto todo al servicio del ser humano, y por eso todo es una bendición para el hombre.
El concepto de arrogancia en las bendiciones (se ve a sí mismo como fuerte): El engaño sobre las bendiciones significa que una persona se ve a sí misma como fuerte debido a las bendiciones que tiene, y la razón de ésto es el descuido de Allah y la otra vida, porqué si conociera a Allah y la otra vida, lo sabría.
La verdad de su debilidad.
Una persona conoce la verdad, ignora la verdad o sabe lo contrario de la verdad. El conocimiento de la verdad es conocimiento de Allah y el conocimiento de la verdad del alma es descuido de Allah y el conocimiento de lo opuesto a la verdad es la vanidad.
- Hay dos tipos de personas: el primer tipo conoce a Allah y se conoce a sí mismo, y el segundo tipo es ignorante de Allah y arrogante consigo mismo, es decir, es ignorante de Allah y sabe lo contrario de la verdad misma.
La razón del engreimiento es el descuido de Allah, porque si conoce a Allah, conoce la verdad acerca de sí mismo.
El verdadero conocimiento del Creador y del más Allá es el que conduce al verdadero conocimiento de la debilidad humana, y el verdadero conocimiento de la debilidad humana conduce a la sumisión auténtica.
La vanidad en las bendiciones es lo opuesto al verdadero conocimiento, y la vanidad en las bendiciones es el conocimiento engañoso del poder de una persona debido a las bendiciones que tiene, y lleva a la persona a sentir que tiene un cierto valor, estatus y grandeza, y que no es débil y eso le conduce a la falta de sumisión.
El hombre tiene poder y Allah Todopoderoso tiene mucho más poder. El poder del hombre está representado por las bendiciones que otorga Allah y qué ha otorgado a la humanidad la voluntad, la mente, el oído, el dinero, la vivienda y las cosechas. Etc., el hombre debe entregarse al poder de Allah porque el poder de Allah es mayor que el poder del hombre y porque lo que el hombre tiene en realidad es una bendición de Allah y no su propio poder. Por ejemplo, si un hombre se encontrara de frente con un enorme ejército armado con todo tipo de armas, debe rendirse y arrojar sus armas a la tierra, pero el tonto tantea la fuerza de éste ejército como si no la viera para no rendirse y olvidar la existencia de éste ejército.
En lugar de que las bendiciones sean una razón para conocer el poder, la fuerza y las bendiciones de Allah, una persona es engañada por ellas, afirmando que le pertenecen y que él las creó para sí mismo y las considera su fuerza, por lo que no quiere rendirse.
Las bendiciones de Allah sobre el hombre incluyen bendiciones dentro del ser humano, como la salud, el oído, el habla y la visión, y bendiciones mundanas como el dinero, los hijos, los deseos y la tecnología, etc.
Las bendiciones que hay en el alma de una persona son pequeñas en comparación con la capacidad de Allah Todopoderoso. La capacidad de oír no es nada en comparación con la capacidad de Allah de oír, y lo mismo ocurre con todo. Allah Todopoderoso no se cansa, no se enferma, no duerme, ni muere, Gloria a Él.
Las bendiciones de éste mundo comparadas con las bendiciones del más Allá son muy pequeñas y desaparecerán, yá sea en comparación con la duración de su existencia en comparación con la eternidad en el más Allá o su valor en comparación con el valor de la bienaventuranza en el Paraíso.
Así como las bendiciones del mundo son pequeñas en sí mismas, una persona no puede tener una abundancia de los placeres del mundo más allá de cierto límite. Por ejemplo, si come en exceso, se cansa. No es un asunto fácil, yá que hay muchos competidores para ello. Así como Allah ha puesto una cierta cantidad de placeres y sustento para el hombre, no puede aumentarlos, así como una persona no puede prevenir enfermedades, aflicciones, etc.
El hombre se envanece con las bendiciones que Allah le ha dado, como los ojos, la nariz y el aire, y con los placeres mundanos que le ha dado, como el dinero, los deseos de las mujeres, la comida y la bebida, y no acepta mirar millones de dólares como triviales, y no acepta considerar triviales los placeres de los deseos, y no está de acuerdo en que todas las bendiciones son sólo un regalo de Allah para él, aunque esté convencido de todo eso, pero es vanidoso consigo mismo y con el mundo y no quiere sentir que es débil.
¿Por qué una persona no presta atención a su realidad y a la realidad del mundo y la ve como de un gran valor en contraste con su realidad?
Una persona está segura de que las bendiciones son pequeñas y pasajeras, y al mismo tiempo las mira con una mirada de glorificación y asombro, por lo que sus sentimientos se apegan a sí mismo y al mundo, y se deja engañar por sí mismo y por las bendiciones que tiene y se ve fuerte por eso, por lo que no se somete, considerando que él es fuerte.
El valor de algo se conoce en comparación con otra cosa. La existencia del más Allá hizo de éste mundo una cosa trivial y sin valor. Si no existiera el Señor ni el más Allá, el mundo sería muy grande. Porque no hay nada ante una persona que no sea ella misma.
Si una persona primero presta atención a la realidad de la otra vida, ve el mundo tal y como es y, por lo tanto, no experimenta emoción mental, asombro, temor, cierto desconcierto, molestia o admiración por el valor del dinero, los deseos, las posiciones o cualquier otro asunto del mundo, y mira el dinero, los deseos y el mundo con una mirada de desprecio y no de glorificación.
Imaginar el significado aparente de un asunto sin imaginar su comparación con otras cosas lleva a ver algo trivial como grande y ver algo grande como trivial. Ésto resulta en un sentimiento engañoso del valor del mundo, viéndolo como si tuviera un gran valor a pesar de ello, su insignificancia es extinción, por eso ve las cosas al revés.
- Entonces, la visión que una persona tiene del dinero y de las personas ricas es de asombro, admiración, glorificación y aprecio por su gran valor, así como su visión del grado de placer que produce codiciar mujeres o mirar otras cosas, etc. mientras que su visión del destino de Allah es como su visión de cualquier cosa que no beneficie ni dañe, porqué el poder de Allah no atrae su atención. Básicamente, no siente ningún impacto o importancia en ésto, y su visión del más Allá es similar a su visión de los cuentos de hadas y ciencia ficción, etc.
- Pero si una persona mira las realidades de las cosas, su visión de lo que le rodea cambia, porqué descubre la realidad de éste mundo y no siente su pérdida, y descubre la realidad de la otra vida y siente su seriedad, por lo que su visión de las cosas es una visión del más Allá y no una visión mundana. Por ejemplo, no mira a los que tienen prestigio y poder con una mirada de asombro, sinó que recuerda que se dirigen a la tumba y lo abandonan todo y son vistos como débiles y pobres mientras están en el infierno y son atormentados, por lo que él siente lástima por ellos en éste mundo mientras se acercan a las fuentes de la destrucción: "De hecho, temo por vosotros el tormento de un gran día."
¿Por qué una persona ve los deseos mundanos como grandes y no puede resistirlos? Ésto se debe a que no lo comparó con los deseos del Paraíso ni con el castigo por éstos deseos, por lo que no hay comparación. El significado de que una persona todavía no puede resistir los deseos de éste mundo es que todavía no ha conocido la otra vida, mientras una persona siga enojada, emocional y afectada por los dolores y problemas de éste mundo, significa que todavía no ha conocido la otra vida. Sabe que el mundo se acaba y que el dolor del mundo se acaba y nada es comparado con el dolor del fuego del infierno.
El valor de algo se conoce en comparación con otras cosas. Si una persona cierra los ojos a las cualidades y habilidades del Creador y se mira a sí misma y no presta atención a la grandeza del Creador, entonces..
"De verdad temo para vosotros el castigo de un día grave."(Sura 26 [Los Poetas] verso 135.)
Éstas personas tienen un conocimiento falso de sus verdaderos yoes, por eso se ven a sí mismos como fuertes, por eso se engañan a sí mismos con las cualidades y habilidades que tienen, la vida que disfrutan y las cosas mundanas que tienen.
Debe haber una comparación entre el poder de Allah y el poder del hombre, la visión de Allah y la visión del hombre, la capacidad de oír con Allah y la capacidad de oír con el hombre, entre la materia natural y la materia sobrenatural, entre el valor de éste mundo y el valor del más Allá, y la comparación entre la salud de una persona en éste mundo y su salud en el Paraíso, y la brevedad de su vida en éste mundo en comparación con la duración de su vida en la otra vida después de la muerte, y la comparación entre los deseos y el castigo por ellos, y así sucesivamente hasta que la persona despierta del coma y se da cuenta por su negligencia de que el poder de Allah y el terror de la otra vida es una realidad terrible, y luego el conocimiento de Allah cuando se alcanza la otra vida.
- Si una persona cierra los ojos al más Allá y no presta atención a su gravedad, ve el mundo en contraste con su realidad y, por lo tanto, lo ve todo grandioso porqué no hay nada ante él excepto el mundo. Está asombrado y son asombrados, impresionados, aterrorizados, asustados, desconcertados y sobrecogidos por la grandeza de la importancia y el valor del dinero, por la dulzura de los deseos, y por la grandeza de las posiciones y otros asuntos de éste mundo: "Y quien esté ciego en ésto, En el Más Allá, estará ciego y más desviado del camino, y ésto lleva a que sus sentimientos estén apegados a éste mundo y vivan para él. Por lo tanto, la única cura para el apego de una persona a éste mundo son los deseos y los pecados es conocimiento de Allah y del Más Allá, y es imposible que una persona abandone los deseos y los pecados a menos que conozca verdaderamente el Más Allá con certeza.
Cuanto más débil es la atención a la realidad del más Allá, más ve éste mundo como grandioso, y cuanto más fuerte es la atención a la realidad del más Allá, más insignificante ve éste mundo.
Si una persona no siente la fuerza de lo que es Fuerte y la debilidad de lo débil, entonces..
"Y quién esta ciego aquí, lo estará también en la Última Vida y más extraviado aún del camino." (Sura 17 [Al-Isra] verso 72.)
Su mente es defectuosa. Éste defecto es su incapacidad para sentir el valor de las cosas, y si una persona pierde el sentimiento del valor de las cosas, ve poder y grandeza en el dinero, y en el prestigio o los deseos, y no siente el poder y la grandeza de las cosas de Allah, entonces su temor, sumisión, glorificación, amor y esperanza está en éste mundo, su confianza en él y su trabajo por él, entonces ésto no es adoración para Allah.
Las bendiciones pueden conducir a una guía o llevar a un desvío, dependiendo de la visión que una persona tenga de ellas:
- Si una persona mira las bendiciones como realmente son (es decir, tan pequeñas) y como bendiciones de Allah para el hombre que lo llevan a la guía y adoración de Allah, y si una persona mira las bendiciones contrarias a su realidad, es decir, como de gran valor y es engañado por ellos, le hará negarse a vivir sumiso a Allah Todopoderoso.
¿Las bendiciones son grandes o pequeñas?
- Sin comparar nada, las bendiciones son grandes porqué son muy importantes para una persona, y sin éstas bendiciones no puede vivir, yá que las necesita con urgencia, y sólo quien las ha perdido sabe el valor de una bendición que es evidencia de la fuerza de una persona, y su ausencia es la evidencia de la debilidad de esa persona.
Pero en comparación con otras, son muy pequeñas. Las bendiciones son dos cosas, que son cualidades de una persona, como la capacidad de oír y ver, y las bendiciones del mundo, como el agua, el aire y la tecnología. Si comparamos las bendiciones que son habilidades en el hombre y las habilidades del Creador, entonces no son nada, y si comparamos las bendiciones de éste mundo y las bendiciones del Paraíso, no son nada, entonces la verdad de las bendiciones es esa, que son muy pequeñas.
Si no hay Creador ni vida futura, entonces las bendiciones son muy grandes para el ser humano. En éste caso no se llaman bendiciones, asumiendo que el ser humano es quien las posee.
Quien lo hizo para sí mismo, en éste caso las bendiciones son grandes y son una fuente de fortaleza para la persona.
La pequeñez de las bendiciones que tiene una persona es evidencia de su debilidad. Si asumimos que una persona posee bendiciones y él es quien las creó, entonces son pequeñas en comparación.. ¿Y qué pasa si la persona no las tiene, O tiene escasas bendiciones, y ni es él quien las creó para sí mismo? Ésto es la evidencia de la completa debilidad de la persona.
- La arrogancia de una persona ante las bendiciones y considerarlas como su poder es evidencia de que no tiene en cuenta a Allah y la otra vida, y la evidencia de que trata las bendiciones como si no hubiera un Creador ni una vida futura, como si nadie las creara para él y se las otorgara sobre él, sinó que él es quien las creó para sí mismo y él es quien las posee. Entonces el pueblo de Qarun le dijo: (No te regocijes, porque a Allah no le agradan los que se regocijan.) Y ellos dicen: "Pero Me lo dieron según el conocimiento que tengo." Y el Verso coránico dice: "Y si después del daño que le tocó le hacemos probar una misericordia de Nuestra parte, dice: Esto es cosa mía, no creo que la Hora vaya a llegar y aún en el caso de que volviera a mi Señor, sin duda que tendría junto a Él lo más hermoso.
Les haremos saber a los que se negaron a creer lo que hicieron y les haremos gustar parte de un duro castigo."(Sura 41 [Fussilat] verso 50.) Seguramente dirán: "Esto es cosa mia.." Con mi esfuerzo y sólo esfuerzo, pero no ve que es algo de Allah.
Las bendiciones son evidencia del Creador porqué el hombre no puede encontrarlas y su conocimiento se limita a dominarlas con una precisión milagrosa que satisface la necesidad del hombre, pero el hombre ignora eso y trata las bendiciones como si fueran su poder y que él fuera quien las creó para sí mismo.
Tratar las bendiciones como evidencia de la fortaleza humana: Hay dos maneras de lidiar con las bendiciones:
O una persona trata las bendiciones como evidencia de su debilidad, y éste es el enfoque correcto, o una persona trata las bendiciones como evidencia de su fortaleza, y ésto es arrogancia en las bendiciones que otorga Allah.
Assalamo Aleikum.