EL BUEN FINAL.
Parte catorce.
En un Hadiz encontrado en Jami’ al-Tirmidhi, N°. 664, el Profeta Muhammad (que Allah le bendiga y le conceda paz) recomendó que la caridad extingue la ira de Allah Todopoderoso y previene una muerte mala.
Ésta caridad incluye tanto la obligatoria como la voluntaria. Como se menciona en éste Hadiz, la caridad tiene un poderoso efecto positivo porque el dinero suele ser un asunto mundano apreciado por la gente. Si se lo entregan a Allah Todopoderoso donándolo a los necesitados, Allah Todopoderoso apartará su ira, la ira de su desobediencia. Cuando ésto sucede, la persona se ve envuelta en la misericordia de Allah Todopoderoso, que la guiará con seguridad a través de las dificultades, tentaciones y pruebas que enfrenta en éste mundo. Al llegar a la muerte, mueren en obediencia a Allah Todopoderoso: es decir, como un verdadero musulmán.
Una muerte infernal ocurre cuando una persona muere sin fe. Ésto puede ocurrir cuando una persona tiene una fe débil debido a la ignorancia del conocimiento islámico. Cuanto más se adquiere conocimiento islámico y se actúa conforme a él, más fuerte se vuelve la fe. Una muerte infernal también puede ocurrir cuando se persiste en los pecados graves, como descuidar las oraciones obligatorias. No hace falta ser un erudito para determinar dónde terminará esa persona en el más Allá. Por eso, el Profeta Muhammad (que la paz y las bendiciones sean con él) aconsejó en un Hadiz encontrado en Yami' al-Tirmidhi, Nº 1961, que la persona generosa está cerca de Allah, cerca de la gente, cerca del Paraíso, cerca del Paraíso y lejos del Infierno.
Por lo tanto, los musulmanes deben acostumbrarse a donar caridad regularmente, según sus posibilidades, pues Allah Todopoderoso ve la calidad en la sinceridad, no en la cantidad. Incluso una palmera plantada en el camino de Allah Todopoderoso tendrá una recompensa mayor que la de una montaña. Ésto se prueba en un Hadiz que se encuentra en Sahih Muslim, Nº 2342.
Finalmente, debemos recordar que la caridad incluye todas las buenas acciones que ayudan a los demás, pero no solo con el dinero. Por lo tanto, quienes no poseen riquezas deben dar caridad de otras maneras, como brindarles tiempo, energía y apoyo moral. Lo mínimo que se puede hacer es abstenerse de dañar verbal o físicamente a los demás, yá que ésto se considera caridad hacia uno mismo. Ésto se menciona en un Hadiz que se encuentra en Sahih Muslim, Nº 250.
Assalamo Aleikum.
