LA CARIDAD es COMO UNA SOMBRA PROTECTORA.
Parte novena.
En un Hadiz encontrado en Al-Wa’i’ wal-Fiqh por el Imam Al-Mundhiri, N°. 603, el noble Profeta Muhammad (que Allah le bendiga y le conceda paz) recomendó que cada persona se mantenga bajo la sombra de su caridad en el Día de la Resurrección.
Es importante tener presente que ésta es una bendición vital, yá que el sol estará a tres kilómetros de la creación el Día del Juicio. Un hadiz de Yami' al-Tirmidhi, N° 2421, advierte contra ésto: «La gente tiene dificultades para soportar el calor de un día de verano, así que ¿cómo podrán soportar el calor del Día del Juicio sin sombra?».
Por lo tanto, el musulmán debe esforzarse por dar caridad con regularidad, independientemente de la cantidad. Allah Todopoderoso no evalúa la cantidad, sinó que juzga las obras por su calidad, es decir, su sinceridad. Ésto se confirma en un Hadiz que se encuentra en Sahih al-Bujari, Nº 1.
El Hadiz de Sahih al-Bujari, Nº 6465, afirma que las obras más queridas por Allah son las realizadas con constancia, incluso las más pequeñas. De hecho, Allah Todopoderoso ha dejado claro que recompensa las obras incluso si son del tamaño de un átomo. (Sura al-Zalzalah 99, verso 7)
Quien haga el peso de un átomo de bien lo verá.
Por lo tanto, no hay excusa para que los musulmanes no donen limosna regularmente por la causa de Allah Todopoderoso, con la esperanza de obtener una fuerte sombra que los proteja del intenso calor de éste gran día.
Finalmente, debemos recordar que la caridad incluye todas las buenas acciones que ayudan a los demás, no solo el dinero. Por lo tanto, quienes no poseen riquezas deben dar caridad de otras maneras, como brindarles tiempo, energía y apoyo moral. Lo mínimo que se puede hacer es abstenerse de dañar verbal o físicamente a los demás, yá que ésto se considera caridad hacia uno mismo. Ésto se menciona en un Hadiz que se encuentra en Sahih Muslim, Nº 250.
Assalamo Aleikum.
