SOBRE LA MEDITACIÓN.
En el nombre de Allah, el Misericordioso, el Compasivo.
Alabado sea Allah que no ha predeterminado [a los hombres] una dirección o un campo para llegar [mediante los ejercicios espirituales] a Su Poder y no ha establecido un camino al cerco de Su Grandeza en los escalones que se deben subir para el ingreso de las flechas que la mente debe hacer, pero ha dejado confundidos a muchos y asombrados a otros en los corazones de los que buscan en el desierto impenetrable de Su Gloria, de modo que cada vez que tiemblan para llegar a su meta son forzosamente apartados de los esplendores de Su Majestad, pero cuando, desesperados por alcanzarlo, quisieran alejarse, se oyen gritar desde los pabellones de la Belleza: "¡Perseverancia! ¡Perseverancia!". Entonces se les dice: "Dense a reflexionar sobre su humilde condición de siervos, porque si meditaran en la Majestad del Señor, nunca la podrían medir; y si buscan algo que va más allá de examinar sus cualidades, entonces consideren cómo llegan allí, implacablemente uno tras otro las gracias y los beneficios de Allah son altísimos y se renuevan para cada uno de ellos en el recuerdo de Allah y la gratitud hacia Él aunque exista dificultad o facilidad, éxito y pérdida, restauración y ruina, ocultación y revelación, fe e incredulidad, reconocimiento y negación. Si, pues, pasáis el examen de los Actos [divinos] al de [Su] Esencia, intentáis una empresa nefasta y os arriesgáis, superando el límite de la facultad humana haciendo algo ultrajante e injusto; en efecto, los intelectos quedan deslumbrados aun antes de ser iluminados por Él, retrocediendo necesariamente, en la Bendición y abundante salvación que sean con Muhammad, señor de los hijos de Adán, aunque él no consideró su señorío como gloria, sino como una bendición que permanece para nosotros como provisión y tesoro [cuando estamos] en el recinto de la Resurrección, y también en sus parientes y camaradas, cada uno de los cuales era como una luna llena en el cielo de la religión y una guía para el grupo de musulmanes.
En la sunnah encontramos ésta tradición: "la meditación (tafakkur) de una hora es mejor que la adoración de un año", y la exhortación a meditar, considerar, examinar, reflexionar aparece a menudo en el Libro del Allah Exaltado; tampoco se ignora que la meditación es la llave para acceder a las luces de la contemplación, el principio para obtener el discernimiento, la red [para capturar] las ciencias y [para capturar] las nociones y las ideas. Sin embargo, la mayoría de los hombres, a pesar de haber conocido el mérito y el valor de la meditación, han ignorado su verdadera naturaleza y sus frutos, dónde comienza y hacia dónde puede llegar, cuál es su camino y cuál es su campo, cuál es el método y cuál es el camino que se debe [realizar] y nunca se ha enseñado cómo, sobre qué y por qué se debe meditar o si lo que se busca con la meditación se requiere para uno mismo o para un fruto que es obtener: si es para una fruta, ¿cuál es ésta fruta? ¿Se trata de las ciencias ('ulûm) o de los estados espirituales (ahwâl)? o ¿el uno y el otro juntos? Destacar que todo ésto es importante y hablamos de ello en donde ya sabemos.. desde el mérito de la meditación, luego de la naturaleza y el fruto de ella, luego de los caminos que recorre el pensamiento y los campos en los que vaga, ¡si Allah el Altísimo quiere!.. in sha Allah.
