VIVE COMO MUSULMAN..
Y MUERE MUSULMAN.
Assalamo aleikum.
Siempre llegarán aquellos, que se cruzan con el dilema en éste tema y se plantean la Pregunta: ¿Cuál es la situación que tomará un individuo para vivir como un musulmán, y morir como musulmán y ser anexionado al grupo de personas justas del otro lado?..
Bien. En primer lugar, la vida de una persona como musulmán es un tema importante para que también muera como musulmán. En un Hadiz, nuestro Profeta (s.a.w.s.) - puede ser enunciado en términos de criterios del hadiz - "Cómo vives, morirás, cómo mueres, resucitarás". Es decir, el otro mundo se configura según el estado de la muerte del creyente. La situación en el estado de muerte tiene lugar en la línea de la vida del creyente. Si se ha vivido una vida perfectamente decente y de un alto nivel, (si siempre se ha preservado la conexión con el Señor), si se ha cultivado en el significado y el espíritu de Allah, en cada cuerpo y facultad, en la mente y el espíritu, entonces el apartarse de éste mundo estará en la misma dirección que el perdón y la gracia de Allah. Por otro lado, si no puede profundizar en el tema de la fe, esta vez, esa persona pasará de éste mundo con un vacío total.. desapercibido.
Los Compañeros (B) tuvieron muchas observaciones tanto en lo negativo como en lo positivo sobre éste tema, y estas fueron mayormente tratadas en los libros que compilan estos temas que activan el alma del hombre, tocan su corazón y así vuelve su mirada al más allá en la cuenta. Un ejemplo de esto puede ser un tratado del Imam Qurtubî. Como vemos en tales obras, hay ciertas personas de los predecesores que se dieron a la fuga cuando murieron. Porque esas personas son las que han tratado con el Corán toda su vida, lo han amado y puesto su corazón en él, quienes leen el Corán en voz alta aunque estaban en coma, y sus lenguas nunca se callaron con el nombre de Allah. Éste tema ahora se ha convertido en un subconsciente para ellos y casi se ha convertido en el motor de sus facultades internas. Para un musulmán, que tiene a la oración en un gran lugar de su vida, lo más dulce en el momento de la muerte, está en la presencia de su Señor.
Es poner la cabeza en el suelo y postrarse. Como se revela en el hadiz, lo más cerca que una persona está de su Señor es en el estado de postración. Tal persona quiere entregar su alma a su Señor en todas las postraciones. De hecho, también hay quienes murieron de ésta manera, cuando estaban haciendo el el salat.
En cambio, en el otro polo, hay gente que -Allah les perdone también- " Que llevan el caballo al matadero y lo atan, barren debajo, y traen preparada la escoba", o revelan que "Había algo en mí".. diciendo, que se fueron al otro mundo así.. como caballo al matadero. Sí.. han existido muchas personas que han entregado sus almas a estos engaños al decir estas palabras. Porque, así como una persona ha vivido, su vida se convierte en su subconsciente. Cuando una persona se desmaya, los problemas subconscientes resucitan y presionan a las personas hasta cierto punto. Esta situación se extiende hasta la tumba. De hecho, y como una extensión de ésto, cuando un ángel llega a la tumba y le pregunta por su Señor y su libro, le diga: "Trae la cesta, darles hierba y paja". Es posible que él diga estas palabras en ese momento.
Nuestro deseo de nuestro Señor, es que nuestro final de vida sea auspicioso. Es por eso que el Corán dice: "No seas pecador, trata de morir como musulmán, no de otra manera". Mientras tanto, una pregunta puede venir a la mente: "¿Está en nuestro poder morir como musulmanes?"
¡Vosotros que creéis! Temed a Allah como debe ser temido y no muráis sin estar sometidos*. * [Es decir, no muráis sin ser musulmanes.] (Sura 3 Al İmrân,102.)
Pero no debemos de olvidar, que como creyentes, tenemos los medios a nuestro alcance sobre una fe incuestionable y debemos estar firmes en ello. Una vez que la bondad da a luz a esa bondad. Sí, como se afirma en un hadiz, "lo bueno sale de lo bueno y lo bueno da buenos resultados". Por ejemplo, Allah ablanda el corazón de un creyente que da caridad y le da el amor por la adoración. Este amor por la adoración en esa persona da a luz el amor de hacer nuevas y buenas obras. Igual que en un círculo vicioso, (llamado círculo vicioso sobre una cosa vacía), nace una nueva cosa vacía; así, en cambio, en un círculo vicioso justo y (fértil) es una bendición, y produce un nuevo amor, entusiasmo y bondad. Por lo tanto, el creyente correrá de nuevo y ese correr lo conducirá a una carrera positiva.
He escuchado (de un amigo mío) que ciertas personas pasaron su juventud en oración y súplica. También hemos visto algunos, que mientras hacían el ruku en la oración, se fueron en aquel momento. También afirman que otro hombre murió después de decir "Allahu Akbar" mientras se postraba. Mi Señor los llevará de la misma manera en que una persona está llena de emociones. Por supuesto, ésto no significa, que en la oración quien no muere postrado ha quedado en un mal estado. De hecho, no se puede decir que una persona que muere sin decir lo que tiene que decir le vaya mal. Nadie puede decir tal cosa, ni puede afirmarlo. Sin embargo, cuando una persona que vive bien y luego sella bien su vida, muere - con la gracia y la gracia de Allah - y en cualquier caso, le va bien. El destino de una persona que ha hecho cosas malas inconscientemente ese/si debe ser temido.
Otro tema relacionado es éste: La creencia de un hombre en su Señor debe impregnar su alma a lo largo de su vida de tal manera que la mano del diablo no tenga poder para arrancarle esa creencia, que ninguna vacilación lo golpee o le sacuda. Tienen que hacer encajes de la contemplación para su vida diaria. Por ejemplo, una sola pieza de evidencia, es suficiente para lograr una opinión sobre el tema de la creencia en Allah. Creemos en nuestro Señor - in sha Allah - y que no pensemos de otra manera; Sin embargo, necesitamos reforzar esta creencia de tal manera que si nos encontramos con mil filosofías, si nos hablan de los cientos de resultados positivos de la ciencia que llevan a la negación, si nos quieren cegar vendando los ojos con mil luces y trucos, debemos creer en él como conclusión sólida con el refuerzo del conocimiento, y debemos mantenernos tan firmes que ni los demonios humanos ni los genios puedan alcanzar nuestra fe local. De hecho, la fe no debe quedarse solo en nuestros corazones, sinó que casi debe circular en la sangre de todas nuestras arterias. En las palabras del Mensajero de Allah, (ByP), el diablo circula en la sangre de las venas de una persona, cabalga sobre los glóbulos rojos y blancos, golpea su corazón e inflige conflictos; entra en su cerebro y lo confunde. La fe debe actuar hasta en la sangre del creyente para que el demonio sea sofocado en todas partes por el poder de la fe, y que la fe entre en nuestro secreto y conquiste nuestra memoria. Ciertamente, debemos tener tal relación con nuestro Señor que otros no puedan entenderlo en absoluto, y Satanás no debería poder entenderlo. Solo nuestro Señor debe saber éste punto y nuestros corazones deben sentirlo. Al avanzar constantemente en éste tema, debemos estar tan cerrados a las dudas y vacilaciones provenientes de la ciencia y del universo, que el diablo no perturbe nuestra mente con diferentes juegos en el último momento. Por supuesto, esto también depende de la realización de los ejercicios a lo largo de nuestra vida y de una contemplación extraordinaria.
Otro tema que debe ser considerado para morir como musulmán es éste: Pensar en la muerte a menudo, sintiéndola en la raíz de nuestro cuello en todo momento, rezando con el "râbita-i mawt", como el Ahl del sufismo, arrojar a la muerte, pensar en la muerte en ciertos momentos, y editarse con ese encuentro de vez en cuando.. Sí, "¿Cuándo encontraré a mi amante?" dice el devoto. El Profeta (s.a.w.s.) dijo: "Si una persona desea estar en contacto con Allah (al decir mi Señor, mi Señor, arde como el ardiente deseo de un amante), y/a Allah le gusta encontrarse con él (en lo que sea sagrado) si tiene miedo de la muerte, y si no desea estar en contacto con el Señor, Allah no quiere que ellos vengan ante Él ”. (Hafizanallah).
Todo creyente que tiene fe en su corazón, también debe tener ese deseo puro y sin brizna de egoísmo; Una persona que está ardiendo por el favor, debe levantar la cabeza y hacer la pregunta "¿Ha llegado a mi ciudad natal?" Pero debe esperar a los demás como él espera. Al ver el ataúd y la veneración más honorable sobre las alas de los ángeles, dijo: "No quiero la muerte porque mi Señor no lo ordenó. De lo contrario, la muerte es la pista de aterrizaje más importante para que yo pueda volar a los Cielos". Un creyente puede decir: Él (de Él viene todo).. se vuelve deseoso sólo -por así decirlo- del que desea. Con respecto a éste deseo y anhelo, Allah Todopoderoso dice: "Si mi siervo se acerca a mí un palmo, me acercaré a él un codo. Si se acerca a mí un codo, me acercaré a él una braza. Si viene a mí caminando, correré hasta él". Y esta intimidad llega a ser tal, que Allah Todopoderoso se convierte en el ojo que ve de ese creyente, y esa persona ya no verá nada malo, y Allah será su oído que escucha, por lo que evaluará todo en la mejor manera y no escuchará lo que escucha de malo, su mano lo sostiene, y si tiene un pie que camina, Allah lo mantiene alejado del mal y no lo dirige en una dirección negativa.
Que nuestro Señor nos trate según Su eterna Gracia, y que Él nos haga felices con un sinfín de dones y dádivas espirituales, conforme a la escala de Sus sirvientes. In sha Allah.
Assalamo aleikum.
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Referencias:
Abu Dawud, al-salat 148; 78.
Sura 3 Al İmrân,102.
Bujari, i'tikaf 11, 12, adab 121, ahkam 21; Muslim, salam 23, 24.
Bujari, zakat 41; Muslim, dhikr 14.
Bujari, al-tawhid 15, 50.
Muslim, arrepentimiento 1, y dhikr 1, 20-22.
