SABIDURÍA EN DOSIFICACIÓN.
SOBRE GUARDAR SILENCIO.
En un hadiz encontrado en Jami' al-Tirmidhi, n.° 2501, el profeta Muhammad, (que Allah le bendiga y le conceda paz), declaró que quien permanezca en silencio se salvará.
Es decir, a quien guarde silencio sobre conversaciones vanas o maldades y solo diga buenas palabras, Allah Todopoderoso lo salvará en ambos mundos. Es importante entender que la razón principal por la que las personas van al infierno es por sus palabras. Ésto es advertido en un hadiz encontrado en Jami' al-Tirmidhi, no. 2616. De hecho, basta una sola palabra malvada para que una persona entre al Infierno en el Día del Juicio. Ésto ha sido probado en un hadiz encontrado en Jami’ al-Tirmidhi, No. 2314.
El discurso puede ser de tres tipos: El primero: un discurso reprensible que debe evitarse a toda costa. El segundo: una charla vacía que solo conduce a una pérdida de tiempo, lo que a su vez conduce a un gran arrepentimiento en el Día del Juicio. Además, el primer paso hacia el discurso falso es a menudo el propio discurso falso cuando se habla demasiado. Así que es mejor evitar éste tipo de conversación. El último tipo es el buen discurso que siempre debe adoptarse. En éstos aspectos, dos tercios del habla deberían eliminarse de la vida humana.
Así como alguien que habla mucho solo piensa un poco en sus acciones y en su vida después de la muerte, eso requiere silencio. Ésto impide que una persona evalúe sus acciones, lo que la inspira a hacer más buenas obras, y el arrepentimiento sincero por sus pecados impedirá que está persona cambie para mejor.
Hablar demasiado hace que una persona se involucre en cosas que no le conciernen. Ésto siempre conduce a problemas para uno mismo y para los demás, como relaciones rotas y desgarradas. Quien no evita lo que no le concierne, no practica bien el Islam. Ésto fue advertido en un hadiz encontrado en Jami’ al-Tirmidhi, No. 2317, y la salvación radica en esforzarse por mejorar la propia fe.
Hablar demasiado también conduce a discusiones y desacuerdos habituales, lo que solo estresa al hablante y/a los demás. Evitar el habla falsa y malvada previene ésto, lo que garantiza que una persona alcance la paz.
Finalmente, para aquellos que hablan mucho y/a menudo discuten en cosas que son entretenidas y nada interesantes.. ésto hará que adopten una mentalidad que les haga odiar el discutir por cualquier cosa y aprendan a escuchar sobre temas serios, como la muerte y el más Allá. Las conversaciones fútiles les impedirá prepararse adecuadamente para la otra vida, lo que les traerá un gran arrepentimiento y posible castigo.
Todo ésto se puede evitar si uno guarda silencio sobre el habla incorrecta y falsa, y en su lugar solo dice buenas palabras. Por lo tanto, quien guarde silencio de ésta manera se salvará de los problemas de éste mundo y del tormento del más allá.